sábado, junio 20, 2009

David Eddings se ha ido

David Eddings nació en 1931 en Spokane, Washington, y creció en Puget Sound.  Luego de graduarse de secundaria en 1949, trabajó durante un año antes de graduarse con título de Oratoria, Drama e Inglés en la universidad. Eddings demostró rápidamente tener talento para el drama y la literatura, ganando un concurso nacional de oratoria, y actuando como actor principal en la mayoría de sus producciones de drama. Se graduó de pregrado en el Reed College en 1954 y postgrado de la Universidad de Washington en 1961. Escribió una novela para su tesis en el Reed College, antes de ser llamado a unirse al ejército de los Estados Unidos.


Luego de varios años como lector en universidades, como no recibió ningún aumento de salario, Eddings dejó su trabajo, se mudó a Denver y encontró trabajo en una tienda de suminitros. A la misma vez empezó a trabajar en su primera novela, La alta cacería, una historia de cuatro jóvenes que cazan venados. Como muchas de sus siguientes novelas, La Alta cacería explora temas de madurez y de llegar a mayoría de edad. Eddings estaba convencido que su futuro era convertirse en escritor. Se mudó a Spokane, donde de nuevo trabajó en una tienda de suministros para cubrir sus necesidades. Escribió muchas novelas que no fueron publicadas, incluyendo El ascenso de Hunseeker, una historia acerca de escalar montañas y de la cual Eddings mismo dijo luego que era "tan mala que hasta a mí me aburrió". Muchas de sus siguientes novelas se parecieron a La alta cacería, historias de aventura y tragedias contemporáneas.


Eddings entró en el mundo de la fantasía gracias a un bosquejo de un mapa que hizo una mañana antes de ir a trabajar. Este bosquejo se convertiría más tarde en la base geográfica del mundo de Aloria, pero Eddings no se daría cuenta hasta años más tarde. Al ver una copia de El Señor de los Anillos, de J. R. R. Tolkien, en una librería, se dice que murmuró para sí mismo "¿Esto sigue dando vueltas por aquí?" y se asombró al enterarse que estaba de hecho en la edición número setenta y ocho del libro. Fue entonces cuando Eddings se dio cuenta que el mundo de la fantasía podría ser prometedor para sus talentos e inmediatamente empezó a trabajar en su bosquejo olvidado.


Eddings vivia en Carson City, Nevada, al suroeste de los Estados Unidos. El 26 de enero de 2007 se reportó que Eddings accidentalmente quemó aproximadamente un cuarto de su oficina, que se encontraba al lado de su casa, junto con su coche deportivo Excalibur y los manuscritos originales de la mayoría de sus novelas. Estaba drenando el tanque de gas de su coche con agua cuando se le ocurrió prender un pedazo de papel y tirarlo al charco para ver si aún era inflamable.


El 28 de febrero de ese mismo año, Leigh Eddings, la esposa de David (nacida Judith Leigh Schall), murió después de una serie de paros cardíacos a la edad de 69 años. Eddings se fue el 2 de junio de 2009.


He de comentar ya a titulo personal que Eddings fue el autor que cambio mi forma de ver la literatura. Antes de empezar a leer las Cronicas de Belgarath iba dando tumbos por diferentes estilos. La saga de Belgarath fue un shock completo. Durante años lei los cinco libros una o dos veces al año.


No tengo palabras para definir como cambio mi forma de ver los libros desde entonces. Si tuviera que elegir un solo libro elegiria esta saga sin dudar. Vale que ahora con unos cuantos años mas la veo diferente pero no tendria problemas en volver a leerla una y otra vez.


Me he quedado de piedra leyendo la noticia.


Espero que descanse en paz y siempre nos quedaran sus grandiosas obras.

2 comentarios:

Corto Maltes dijo...

Me has hecho despertar mucha curiosidad en esta saga. Voy a conseguirla para leeral despues que termine "La saga del exilio". Pensaba empesar la serie "Mundo anillo" pero me gustó como presentaste esta saga.

Prometeo dijo...

La verdad es que no he leida nada de este buen hombre, me quede en El señor de los anillos y solo ultimamente, por un rtegalo, estoy leyendo a George R. R.Martin y su gran saga que me ha enganchado, a por la tercera, y Weiss pero menos...un fuerte abarzo.